El camerunés demostró su potencia y en el segundo asaltó se llevó el combate por nocaut.
Ayer por la noche en el evento 260, el camerunés Francis Ngannou, se coronó como el nuevo campeón de peso pesado de la UFC al derrotar a Stipe Miocic por la vía del nocaut en el segundo asalto.
El combate estelar de la noche prometía muchas emociones por la calidad de ambos luchadores. Sin embargo, el camerunés de 34 años demostró mucha potencia y concentración. Desde el primer asalto, logró imponerse ante el campeón defensor quien nunca se vio cómodo en el octágono, pese a que intentó llevar el combate al piso, a la lucha donde siempre se había mostrado con un desempeño muy notable.
Sin embargo, el retador mostró una buena lectura y pudo neutralizar sus ofensivas. Inició el segundo asaltó y Ngannou fue hacia el frente a demostrar su poderío. Ahí logró conectar con fuerza y precisión a Miocic para propinarle el nocaut que le otorgó el cinturón de los pesos pesados, a este luchador nacido en Camerún pero que emigró a París en busca de mejores oportunidades.
Con el triunfo conseguido ayer por la noche, se convirtió en el primer campeón africano de la historia del peso pesado de la UFC y en el tercer monarca del continente, en activo, tras los nigerianos Kamaru Usman e Israel Adesanya.
“Vengo de la nada. Trabajé todos los días para llegar a donde estoy, pero sé que hay tantos otros que nunca serán tan afortunados como yo, que nunca podrán llegar tan lejos como he llegado”, sentenció el nuevo campeón.
Apasionado del deporte desde muy corta edad. Con 13 años de ejercicio periodístico en diferentes campos (Política, Judiciales, Economía, Desarrollo de proyectos y la escena deportiva).
