La magnífica sensación que está dejando el FC Barcelona se ha vuelto empañada con la suplencia de Gerard Piqué y sus incómodas declaraciones.
Según hablan los medios de comunicación catalanes, la mecha que encendió la pólvora sucedió después del encuentro ante el Bayern Munich. El central declaró que “no juego ni a la petanca”, a lo que Xavi le respondió “que menos iba a jugar”. El de Terrasa tiene muy claro quienes son los titulares y quienes los suplentes.
Como he dicho en innumerables ocasiones anteriormente, este bonito Barça tiene un gran fallo de base. Si el gran acierto ha sido el fichaje de Lewandowski, el gran error es mantener a Piqué, Busquets y a Jordi Alba. De estos tres, ‘Busi’ es el más aprovechable aún y lo es porque aún no ha aparecido nadie que le siente en el banquillo.
Alba no se quiso ir. El club fue claro con él y le propició una salida al Inter de Milán, pero no quiso. Y Marcos Alonso ha llegado como se sabía, para jugarlo casi todo. Si no ocurre una lesión con el ex del Chelsea, Jordi jugará en contadas ocasiones.
Y ahora, el pique, el pulso que quiere tener Gerard Piqué con Xavi es el de la desesperación, porque de los tres citados, el central es el que más conflicto va a generar. Su ego no le hace verse suplente. Y ahora está superado por Christensen e incluso por Eric García. No le puede pillar de improviso, el club y más Xavi, han sido clarísimos con él.
Hay que recordar al ‘3’ estas declaraciones que hizo en su día. “Si me tengo que ir para que venga sangre nueva, me voy” (tras perder 2-8, contra el Bayern) o “me retiraré en el Barça, pero nunca de suplente” (en 2021). Son frases lapidarias para un jugador de 35 años y que cobra 4,6 millones de euros, siendo el quinto central de la plantilla, suplente de todos.
Desde la directiva azulgrana sólo se le pide una cosa, que cumpla su palabra y se haga a un lado. Ante un presente que no es su mejor momento, con la prensa rosa pendiente de su divorcio y siempre muy criticado por sus comentarios en redes sociales, lo mejor que podría hacer es tomar la decisión de salir de la entidad culé. Todo lo demás será un tormento.
Xavi, que debería sólo estar pensando en cómo seguir engrosando este equipo -que cada vez está captando más adeptos- no le va a venir bien tener durante este año a las tres ‘vacas sagradas’ con caras largas. Eso sería un error garrafal.
Colaborador de Diario Deportivo CR, radicado en Madrid-España.
