Pese a que lo importante era contribuir con Erick Marín, se vieron cosas importantes de cara al Apertura 2019.
Un clásico siempre se quiere ganar, no importan las circunstancias externas que rodeen el encuentro, la misión de los clubes más grandes que enfrentan este tipo de encuentros sólo es una, vencer.
Y ayer en “La Joya” de La Sabana, tanto Alajuelense como Saprissa deseaban el triunfo, pero los dirigidos por Andrés Carevic se vieron mucho mejor en el terreno de juego y hasta quedó la sensación de que el marcador pudo ser más abultado.
El león venció 3-1 a un monstruo que todavía no carbura. El Saprissa de Wálter Centeno, fiel a su idea, quiere sacar la bola “limpia” desde atrás, pero parece que su único recurso para hacerlo es Michael Barrantes.
El experimentado jugador, al igual que en el torneo pasado, es quien toma la batuta en la salida del equipo morado pero requiere de compañía. Quizá cuando Jean Carlo Agüero se acople a la institución morada, encuentre ese compañero que tanta falta le está haciendo.
Observamos a un Esteban Rodríguez lejos de su mejor versión, ese pequeño pero hábil volante que toma la pelota y distribuye no apareció. Quien sí destacó y no nos cabe ninguna duda de que será determinante es el volante ofensivo Byron Bonilla. El nicaragüense se la cree, es rápido, habilidoso, encara y el balón en sus pies es sinónimo de peligro.
Vimos a un Saprissa adelantando líneas, sus defensores centrales en varios lapsos del juego estaban posicionados en medio campo, pero ese sistema trae consigo riesgos y hoy Alajuelense los supo aprovechar.
Hay que decirlo, la Liga de Carevic se vio mucho mejor. Con intensidad en la recuperación cuando pierde la pelota y con mucha velocidad en la transición defensa-ataque. Además, hay jugadores que parece que se adaptaron mucho más rápido al equipo de lo que se pensaba.
Adonis Pineda seguro y aplomado, Junior Díaz liderando e incluso portando el gafete de capitán, Bernald Alfaro con buen suceso en el medio campo y Ariel Lassiter que, con más variantes a la hora de encarar, puede llegar a ser determinante para la escuadra manuda.
Bien por las dirigencias de ambos equipos que se pusieron de acuerdo y organizaron este encuentro en beneficio de Erick Marín. Al final, 15060 boletos vendidos de 22 mil que se pusieron a la venta, nos refleja una buena señal y nos recuerda que el fútbol puede ser ese deporte que una lazos y brinde verdaderos momentos de felicidad.
Foto de Kevin Cordero para Diario Deportivo CR.
Apasionado del deporte desde muy corta edad. Con 13 años de ejercicio periodístico en diferentes campos (Política, Judiciales, Economía, Desarrollo de proyectos y la escena deportiva).
