Antes del comienzo del Mundial de Qatar 2022, Gerard Piqué anunció que deja el Barça y abandona la práctica del fútbol.
El impacto de la noticia es total. A partir de ahí, sólo se pueden producir opiniones y reacciones al hecho, a favor o en contra. Pero la decisión está tomada. El defensa más goleador de la Champions, se va.
Piqué parece querer buscar una dignidad, que definitivamente esta temporada había perdido por completo. No ha aguantado más. Su fallo clamoroso ante el Inter, sus continuos pitos desde la grada del Camp Nou y sus frecuentes dolores musculares, han provocado que el ‘3’ tome una de las decisiones más importantes de su vida. La crisis deportiva, hay que añadirle, su complicada vida personal y su vida profesional -que cada vez está más alejada del césped- y mucho más próxima al mundo empresarial.
Ahora nacerá el mito. Sólo se recordarán las grandes actuaciones del central y se le tendrá como ejemplo de barcelonismo, por irse antes de tiempo…
Cada uno tiene su opinión de él. La mía es que Gerard Piqué ha sido un jugador notable dentro del terreno de juego, pero nunca sobresaliente. Siempre se ha sabido arropar de jugadores soberbios en el Barça, y en la selección: Puyol, Mascherano y Sergio Ramos, han sido sus parejas de baile en la zaga, quienes le han convertido en un buen defensa, rectificándole errores en la salida y en la colocación, durante toda su carrera.
Cuando estos jugadores se fueron y los achaques de la edad han aparecido, se ha ido precipitando una caída que no es de este año. Su decadencia tiene una fecha clara, el 2-8 que endosó el Bayern Múnich al FC Barcelona, en cuartos de final, el 14 de agosto de 2020.
Aquel día Piqué hizo unas declaraciones muy famosas, tras el encuentro, sobre si él era parte del error, daría un paso a un lado, en beneficio del club. Pero no cumplió su palabra. Y desde entonces, lamentablemente se ha arrastrado por los terrenos de juego.
La crítica y su desvalorización fue en aumento hasta que Xavi fue muy claro con él. Para la temporada 22/23 partía como suplente de varios titulares. Él aceptó el reto de intentar competir por el puesto en el once, pero no ha conseguido mostrar un nivel adecuado. Y ahora ya, cuando la cuesta le ha superado, ha decidido dejarlo todo, quizás un poco tarde.
Se va teniendo un patrimonio económico personal muy elevado. Con un nuevo tiempo para poder abordar sus cuestiones sentimentales y de juzgados; y poder dedicarse en pleno a sus múltiples empresas.
Con este camino que se ha abierto con su marcha, se marca la senda que deberían continuar otros, como Busquets o Jordi Alba. Ojalá tomen ejemplo y también busquen otros destinos.
El Osasuna vrs FC Barcelona disputado hoy, ha sido el último partido de Piqué, que incluso se ha ido expulsado al minuto 45` + 5. Guste o no, con su marcha se produce un paso más hacia la renovación de la plantilla que tanto sigue necesitando el Barça.
Volverá, seguro. No me cabe ninguna duda. Y será para ser una leyenda. Porque si para mi como jugador no llega a la excelencia, como presidente de la entidad azulgrana será uno de los mejores, me lo marca su manera de comunicarse, su liderazgo y sus múltiples influencias para conseguir sponsor de patrocinio para el Barcelona, así como conseguir que la Supercopa de España se celebre en Arabia.
Suerte Gerard en tu nueva vida. El niño, que no quería ser jugador de fútbol, sino jugar en el Barça y lo consiguió.
Colaborador de Diario Deportivo CR, radicado en Madrid-España.
