fbpx
jueves, abril 25, 2024
Opinión

“EL AMIGO”

S-U15
896views

“Haremos la Selección Nacional por Internet”, (Enrique Angulo).

La FIFA había quitado la sanción a Costa Rica, por haber utilizado “dos forros” en un Mundial U-16. Nos tocó viajar y compartir al equipo de “Moncho” con “La Tricolor”, para buscar la participación en el “Mundial U-20 de Escocia”, que después fue en Arabia Saudí 1989.

Hora de aplicar la novedad e ir a todos los rincones del país -de Paso Canoas a Peñas Blancas-, para dar oportunidad a los jóvenes, sin importar su procedencia.

El Cuerpo Técnico, integrado por Manrique Quesada, Carlos Losilla, “Perla” Bonilla, Marvin Solano, Dr. Rónald Rojas y/o Dr. Martín Zumbado y Manuel Riotte, con Victor ”El Indio” Zúñiga; en una buseta, salía los lunes de San José y regresaba el sábado noche.

Más de 100 futbolistas se presentaban en la cancha anunciada, y desde las 7.00 am se sometían a una batería de 70 pruebas: currículo, chequeo médico, pruebas físicas, circuito técnico, trabajo táctico, partido y “Test de Landa”. Desde el inicio, los aspirantes, con chaleco numerado.

Las evaluaciones de los entrenadores eran anotadas, por el número y color de chaleco; y enviadas al ordenador de la empresa Reenfrío. Allí, Enrique Angulo, con su programa, taburaba los datos e imprimía un listado, con la clasificación de los futbolistas, por puestos, porcentaje, nombre, zona y equipo de procedencia.

¡Toda una novedad! Finalmente esa “U-20”, ganó a México el título de la Concacaf y viajó a Arabia Saudita, con Juan José Gámez de entrenador; tras renunciar quien eligió y preparó a un brillante equipo. Fueron “los carasucias” , bautizados por Gaetano Pandolfo. Y por su lado, Enrique Angulo, fue quien impregnó el primer sello tecnológico a un representativo nacional, hace 30 años. ¡Chapeau, Enrique!

Hoy 14 de julio, gran amigo, mejor persona y referente de una querida familia escazuceña, que activó, entre otras cosas, la ventanilla única municipal, está a la espera de que la ciencia, un accidente fatal y la generosidad de los dolientes, le donen un riñón, que le permita, en plena pandemia, abandonar el Hospital México y seguir disfrutando de esta vida, su familia y los amigos,

¡Dios decide!